Los perros pequeños son mascotas maravillosas y seguras de tener en un apartamento o casa. Sin embargo, mantenerlos bien educados puede ser un poco difícil. Es importante saber como entrenar a un perro desde una edad temprana, ya que esto sentará las bases para su futuro comportamiento. Con esto en mente, hemos creado esta guía paso a paso sobre como entrenar a un perro de raza pequeña, que te ayudará a sacar el máximo partido a tu amigo peludo.
Preparar tu zona de adiestramiento
Antes de empezar el adiestramiento, es importante crear un entorno tranquilo y acogedor. Busca una zona tranquila de tu casa que esté libre de distracciones: piensa en ella como el espacio privado de tu perro. Asegúrate de que la temperatura sea agradable, la iluminación buena y todo esté limpio. También es buena idea tener a mano algunas golosinas y un juguete de recompensa.
Construyendo las bases: Sentarse
El primer comando que se debe enseñar a todo perro es “sentarse”. No sólo es un comando básico, sino que también es una forma estupenda de enseñar a tu perro a tener buenos modales. Para empezar, sitúate delante de tu perro y coge una golosina con los dedos. Sujeta la mano a unos quince centímetros de la nariz del perro. Mueve la golosina hacia arriba y hacia atrás, por encima de la cabeza del perro, y di “siéntate”. Cuando la nariz del perro se mueva hacia arriba y la cabeza le siga, quédate quieto y espera a que se siente. Una vez que lo haga, dale la golosina y alábale.
Construir las bases: Quieto
Quieto es un comando que se debe enseñar después de “sentado”. Es un gran comando tanto para interiores como para exteriores. Para empezar el adiestramiento, pide a tu perro que se siente y se quede quieto. Cuando este llegue a estar completamente quieto, dale una golosina y vuélvelo a repetir.
Construyendo las bases: Ven
El comando “ven” es esencial para su seguridad. Practica este comando en una zona segura y cerrada, sin distracciones. Empieza por enseñarle a tu perro una golosina, y luego le dices “ven” en un tono enérgico, recompensándole cuando venga a ti. Recompensa a tu perro cada vez que le pidas que venga, y aumenta gradualmente la distancia entre los dos. Si tu perro empieza a alejarse, utiliza un tono más agudo y enérgico para que empiece a volver hacia ti.
Solucionar problemas de comportamiento
Incluso el perro mejor educado se comportará mal de vez en cuando. Lo más importante es mantener la calma y ser constante. Cuando tu perro se rebele, dile suavemente pero con firmeza “no” en un tono severo. Si tu perro no obedece, usa el comando “siéntate” para redirigir su comportamiento. Cuando tu perro esté calmado, alábale mucho y recompénsale para mantener un buen comportamiento general.
Supervisar y mantener el adiestramiento
Ahora que conoces los conceptos básicos del adiestramiento de perros pequeños, es importante que sigas trabajando con tu perro para mantener esos buenos comportamientos. Las sesiones diarias de entrenamiento, aunque duren sólo unos minutos, son una parte importante para que tu perro se comporte bien. Utiliza las órdenes de adiestramiento en tu vida cotidiana para reforzar el buen comportamiento y recordar a tu perro quién manda.
Consejos finales para el adiestramiento básico de perros pequeños
Es importante que tengas paciencia y que tus expectativas sean realistas a la hora de adiestrar a tu perro pequeño. No todos los perros aprenden las órdenes y el comportamiento de la misma manera ni a la misma velocidad, así que da a tu mascota tiempo para aprender. No uses la fuerza física ni voces enérgicas, ya que esto puede provocar agresividad y miedo. En su lugar, confía en una gran cantidad de refuerzos positivos, como golosinas, juguetes y palmaditas en la espalda. Por último, asegúrate de que las órdenes que enseñas a tu perro son apropiadas para su edad. No se puede esperar que un cachorro pequeño tenga la misma obediencia que un perro adulto.
Adiestrar a tu perro pequeño puede ser una experiencia divertida y gratificante. Si te tomas el tiempo de seguir esta guía paso a paso de como entrenar a tu perro, seguro que verás los resultados en muy poco tiempo. Recuerda tener paciencia, mantener unas expectativas realistas y utilizar muchos refuerzos positivos. Con práctica y constancia, tu amigo peludo será un compañero de confianza y bien educado durante muchos años.
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